¿A quién no le gustan los macarons? Son pequeñitos, crujientes, delicados y los hay de cualquier sabor que te puedas imaginar. En este caso, estos macarons son de té earl grey, un té típico de desayuno con un toque cítrico, y de ganache de chocolate con un toque también de earl grey. Esta combinación de sabores es muy especial y estoy segura de que os enamorará.
Además, en este post tengo un objetivo, quitaros el miedo a hacer macarons. Muchas veces la gente ve a estos dulces como pequeños mostruitos que cada vez que intentan hacer, por una cosa o por otra salen mal y creedme, esto tiene solución. He probado cientos de recetas de macarons y he leído otros tantos posts sobre los macarons y sus trucos, y he llegado a la conclusión de que hay 3 pasos que si haces bien tienes altas probabilidades de que tus macarons salgan perfectos:
1- Dejar los ingredientes secos bien finos, sin embargo, siempre nos dicen que para esto es importante tamizarlos las veces que podamos, esto es algo un tanto costoso así que esta vez he probado a triturarlos con un procesador de alimentos y la verdad es que se obtiene el mismo resultado o incluso mejor.
2. Dejar SECAR los macarons, y lo pongo en mayúsculas porque esto es lo más importante, tenemos que dejarlos reposar hasta que formen una bonita costra, es decir, hasta que los toquemos y no nos manchemos el dedo.
3. El horneado, tengo muchas recetas de macarons y casi todas ponen que hay que hornearlos a temperaturas muy altas, sin embargo en mi horno si hago esto, tengo todas las papeletas para tener unos precioso volcanes de macaron. Tenéis que averiguar la temperatura y el tiempo a la que cocer vuestros macarons en vuestro horno, porque a pesar de que os lo ponga en la receta esto es una cosa muy personal.
Y estos son mis trucos para convertir nuestros monstruo macarons en unos bonitos y delicados macarons, ahora solo hay que ponerse manos a la masa y tener paciencia!!
Ingredientes:
- 90 gr de claras a temperatura ambiente
- 110 gr de almendras molidas
- 4 gr de té earl grey
- 200 gr de azúcar glas
- 30 gr de azúcar normal
En un bol montamos las claras junto con el azúcar hasta tener un merengue que forme picos.
Mezclamos la almendra, el té y el azúcar glas que habíamos triturado antes y lo vamos incorporando al merengue en 3 pasos, con movimientos envolventes ayudándonos de una espátula.
Nos tiene que quedar una masa que caiga con facilidad de la espátula pero que tampoco esté demasiado líquida, para ello yo lo que hago es una vez ya se haya incorporado la última tanda de ingredientes secos, realizamos unos 10 movimientos envolventes más.
Ponemos nuestra masa en una manga y preparamos el papel de horno, yo siempre pongo una bandeja y unas plantillas bajo del papel.
Vamos haciendo los pequeños circulitos y antes de dejar reposar es importante dar unos golpecitos a la bandeja contra la mesa de trabajo para quitar el aire.
Dejamos reposar durante 1 hora, o el tiempo necesario hasta que se forme la costra.
Precalentamos el horno, en mi caso a 150º.
Horneamos nuestros macarons durante unos 10 minutos, os aconsejo que que os quedéis a ver como suben vuestros pequeñines.
Sacamos los macarons del horno y dejamos enfriar en el propio papel.
Transcurridos unos minutos, ya podremos quitarlos con cuidado y dejarlos enfriar por completo.
Ingredientes para el ganache de chocolate:
200 gr de chocolate negro
200 ml de nata para montar
6 gr de té earl grey
Infusionamos el té con la nata, para ello los ponemos en un cazo y lo calentamos hasta que comience a hervir, lo colamos y reservamos
Mientras, troceamos el chocolate y, a continuación, vertemos la nata caliente sobre el chocolate y removemos.
Dejamos que se enfríe y metemos nuestros ganache en una manga pastelera.
Para acabar, rellenamos nuestros macarons. Cogemos dos tapas que tengan un tamaño similar.
Ponemos nuestro ganache sobre una de ellas intentando que esté bien repartido por toda la superficie.
Cerramos nuestro macaron presionando un poco, hacemos esto con todos los macarons.
Aunque sea tentador hincarles el diente nada más acabarlos, os recomiendo enfriarlos en nevera al menos 24 horas, este paso mejora muchísimo el resultado y están mucho más ricos.
Espero que os haya gustado y que os animéis a macaronear jaja :)
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