Buenos días! ¿Cómo ha ido la semana? Espero que muy bien, aquí en Valencia estamos en plenas fallas y aunque todo el mundo está con los buñuelos y el chocolate yo hoy os traigo un postre muy diferente pero que os dejará boquiabiertos, y es que lo tiene todo, sencillo y buenísimo.
Se trata de unas mousses de Bailey's súper cremosas y con el toque del licor y dulce de leche que convinan perfectamente. Es una receta que os deja margen para ser creativos, podéis hacerla en tarta, en copas, en tarrinas...
Además se acerca el día del padre, y no sé si a vosotr@s os pasa, pero a mí cuando se acercan las fechas especiales en las que hay que cocinar algún postre si o si , toda la imaginación que tengo el resto de días se esfuma, así que si os pasa lo mismo aquí os dejo una idea para sorprender.
¿A que tienen buena pinta? La verdad es que sorprenden, es suave a pesar de todo el dulce que lleva y a mí me encantan para ocasiones especiales y celebraciones.
Como ya os he dicho esta receta admite muchas variantes, si no queréis hacerla en vasos, podéis hacerla como una tarta utilizando un molde desmoldable, o si os parece muy dulce podéis sustituir el dulce de leche por otro ingrediente que os guste más así que ¡Imaginación al poder!.
Por otro lado, sé que el Bailey's es un licor caro, que cuesta aproximadamente unos 12 eu la botella, en mi casa lo compramos ya que en las reuniones es muy común sacarlo a la hora del café pero si no soléis utilizar y os parece caro podéis cambiarlo por otros licores parecidos.
Vamos con la receta...
Ingredientes: (Para unos 8 vasos o una tarta grande)
Base:
- 120 gr de galletas tipo "digestive"
- 65 gr mantequilla derretida
- 200 ml de nata
- 400 gr de queso crema ( yo he usado " San Millán")
- 4 hojas de gelatina
- 125 ml de Bailey's
- 100 gr de azúcar glass
- Dulce de leche ( para decorar)
A continuación, vertemos la mezcla de galleta en nuestro molde o en mi caso vasos y apretamos hasta conseguir una capa más o menos así:
Pero como digo siempre depende de cómo os guste a vosotros. Dejamos enfriar en la nevera.
Por otro lado, hacemos la crema. Preparamos la gelatina sumergiéndola en agua hasta que esté blanda. Calentamos el Bailey's al fuego o al microondas hasta que comience a hervir y en este momento añadimos las hojas de gelatina mezclando bien para que se integre a la perfección. Dejamos enfriar.
Mientras, montamos la nata hasta que tenga una textura cremosa, no nos interesa que esté súper montada ya que entonces nos quedará una crema demasiado dura.
En otro recipiente, mezclamos el queso crema y el azúcar hasta que estén completamente integrados, esto es importante ya que si no es así, se nos pueden quedar grumos.
Cuando el Bailey's esté a una temperatura más baja, no hace falta que esté completamente frío, añadimos este a nuestra mezcla de queso y azúcar, y batimos bien hasta que forme una mezcla sin grumos y homogénea.
Una vez tenemos esta crema preparada poco a poco y en varias veces añadimos la nata montada mediante movimientos envolventes para que no se baje. Tenemos que conseguir una masa con esta textura:
Vale y ahora viene lo bueno, sacamos de la nevera nuestros moldes y metemos nuestra mousse en una manga pastelera para que sea más fácil de distribuir.
Cuando ya tenemos esto, uno a uno vamos poniendo la masa en cada molde intentando que no queden huecos vacíos. por qué imagínate, estas comiéndote tu porción y te encontramas con un hueco, nos deberían un trozo de este delicioso mousse!!
Y ya esta!! Ya tenemos nuestras tartitas o en el caso de que hayáis hecho una tarta pues nuestra súper tarta de Bailey's.
Para que veáis que si no tenéis estos vasos no se acaba el mundo también preparé otros en unos recipientes que tenía en casa.
Bueno, ahora solo queda esperar un poco antes de comer, hay que dejarlos enfriar en la nevera durante mínimo, una tarde y si lo podéis dejar toda la noche, mejor.
Cuando los saquemos, calentamos dulce de leche en el microondas, esto lo hago ya que el dulce de leche lo solemos encontrar un poco compacto y para el efecto que le quería dar necesitaba que estuviese líquido. Añadimos el dulce de leche al pastel, y otra vez, utilizad la imaginación, yo he puesto una capa por encima del pastel pero podéis hacer líneas o lo que más os guste.
Y después... no tranquilos ya no hay nada que hacer... A COMER!!
Os van a encantar de verdad y como veis solo hay que tener un poco de paciencia y no comérselo a cucharadas antes de acabarlo, porque es que está demasiado bueno!!
¡¡Adoro estos vasitos!! Mil gracias por compartirla receta con todos! muuaks
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